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¿Dimisión o Resistencia? El Dilema de la Izquierda ante la Amenaza Ultra, ¡rollo colega!

¿Dimisión o Resistencia? El Dilema de la Izquierda ante la Amenaza Ultra

¿Dimisión o Resistencia? El Dilema de la Izquierda ante la Amenaza Ultra ¡rollo colega!

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Autor: JA.IA 💚 Noticias Castúos

¿Dimisión o resistencia? En un contexto político explosivo, ¿es hora de exigir o de proteger lo ganado? Descubre por qué «condiciones normales» ya no aplican y cómo la derecha y Vox están desmantelando tus derechos. ¡Espabila!

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¿Dimisión o Resistencia? El Dilema de la Izquierda ante la Amenaza Ultra, ¡rollo colega!

A ver, en plan normal, si la cosa estuviera tranquila y los políticos fueran gente «normal» que rinde cuentas y tal, pues sí, yo sería el primero en decir: «¡Pedro Sánchez, a la calle! ¡Elecciones ya!». Porque, vamos a ver, lo del PSOE con la corrupción es fuerte, ¿eh? Que su número dos esté liado y el anterior en un lío de pasta y moral que le da en todo el morro al socialismo… ¡tela! En esas «condiciones normales», Javier Cercas tendría toda la razón del mundo y yo le daría un «like» gigante.

No estamos en condiciones normales, ni de coña.

Pero, ¡ojo!, la movida es que no estamos en condiciones normales, ni de coña. Pedir eso ahora mismo es como de flipado, de alguien que vive en su burbuja de «escritor blanco, rico y sin problemas». Es un privilegio que te cagas, la verdad.

No podemos ir de puristas y soltar sermones sin pensar en dónde estamos parados. Nuestra vida, nuestra posición, todo eso influye un montón cuando opinamos sobre qué debe hacer un gobierno. Y, lo más gordo, sobre si dejamos que los ultras, con toda su mala leche y sus ganas de joder, lleguen al poder. Porque, si llegan, van a ir a saco a por mujeres, inmigrantes, la gente LGTBIQ+, los activistas de izquierdas y, en general, cualquiera que no encaje en su rollo de «familia perfecta» y sus tradiciones rancias. ¡Uf, qué pereza!

La agenda que traen los de extrema derecha es de rabia pura

La agenda que traen los de extrema derecha es de rabia pura, y lo más seguro es que a un Javier Cercas no le toque ni un pelo. A él, como mucho, le dará un poco de «culpa burguesa» por el sufrimiento de los demás, pero su vida seguirá igual de guay. Pero para millones de personas, la cosa va a ser un ataque frontal, sin piedad. Los derechos de las mujeres para decidir sobre su cuerpo, las familias que no son «tradicionales», las minorías… ¡serán su presa favorita! Solo hay que mirar a Hungría o Italia para ver cómo se cargan todo a la velocidad del rayo. ¡Es que es de cajón!

Y ni me meto en el rollo de mezclar la corrupción de los Cerdán y Ábalos con las movidas del juez Peinado contra Begoña Gómez y Félix Bolaños. Es que es de una estupidez mental que, en un tío listo como Cercas, solo se entiende como una jugada para que la derecha mediática le aplauda y él se posicione para las próximas elecciones. ¡Venga ya, por favor!

Se nos viene encima una década chunga, de las que marcan. Los ultras, si llegan, van a hacer que retrocedamos veinte años en solo seis meses. ¡Veinte años! Todos los avances en igualdad, derechos sociales, libertades… ¡a la basura! Y en la situación actual, que estamos un poco en la cuerda floja, ceder el poder así, regalando las elecciones, es una irresponsabilidad brutal. Solo lo defienden los que se van a forrar con ese cambio, pero de izquierdas, ¡cero patatero!

No hay ni un solo derecho a salvo

No puedes ir de izquierdas si le entregas el poder en bandeja a gente que lo va a usar para machacar a los más vulnerables y para cargarse todas las medidas de justicia social por las que hemos luchado cuarenta años. En un momento de shock como este, con la izquierda medio KO, ¡no hay ni un solo derecho a salvo! Ni uno, ni el que creas más seguro. ¡Ni ese!

Javier Cercas tendría razón hace diez años, sí. En otro contexto, su petición de dimisión tendría sentido. Pero ahora mismo, es la opinión de un escritor con pasta, pontificando desde su torre de marfil, rodeado de libros y a salvo de los días chungos que se nos vienen encima. La doctrina marxista, que es de ser práctico, dice que hay que analizar cada situación en su momento. Y ahora mismo, estos derrotistas que, sin querer o queriendo, le hacen el juego a los ultras, son cómplices de la reacción. ¡Así de claro!

Reflexión Final: ¡Espabila, colega!

A ver, después de todo este rollo que hemos soltado, la cosa está clara, ¿no? La movida no es si Sánchez es un santo o si la corrupción es mala (que lo es, obvio). El punto es que estamos en un momento crítico, de esos que te cambian la vida. No podemos ir de puristas y exigir cosas que, en este contexto, solo le hacen el juego a los que quieren cargarse todo lo que hemos conseguido.

Y es que, tío, solo tienes que echar un vistazo a cómo se lo están cargando todo, los derechos y libertades conseguidas durante años en las comunidades donde ya gobiernan los del PP y Vox. No es un cuento chino, ¡está pasando! Cosas que dábamos por sentadas, derechos que costaron un montón conseguir, ¡pum!, de repente están en el aire o directamente desapareciendo.

Así que, la próxima vez que alguien te venga con el rollo de «en condiciones normales…», recuérdale que no estamos en esas. Que la situación es de emergencia y que, a veces, hay que tragar quina para evitar que venga algo mucho peor. No es de izquierdas regalar el poder a quienes te van a joder la vida. Es de ser consciente. ¡A espabilar, que la cosa va en serio!

¿Dimisión o Resistencia? El Dilema de la Izquierda ante la Amenaza Ultra ¡rollo colega!

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